En un mundo laboral caracterizado por su constante dinamismo y competencia desafiante, el estrés se ha erigido como un compañero omnipresente para la gran mayoría de los trabajadores. En esta travesía, descubre cómo la práctica del mindfulness en el trabajo se ha convertido en un valioso aliado para disminuir las tensiones y potenciar la eficacia en el ámbito laboral.
Qué es el mindfulness
El mindfulness, o atención plena, es la práctica de estar consciente y presente en el momento presente, sin juzgar. En el contexto laboral, implica prestar atención deliberada a las tareas y actividades que realizas, así como a tus pensamientos y emociones.
Podríamos decir que el mindfulness en el trabajo es una herramienta poderosa que te permite cultivar una mayor conciencia de ti mismo y de tu entorno, lo que a su vez te ayuda a gestionar el estrés de manera más efectiva.
Integrar el mindfulness en la rutina laboral
Incorporar el mindfulness en la rutina diaria laboral puede ser tan simple como dedicar unos minutos cada día a la meditación o a la práctica de la respiración consciente.
También puedes hacerte consciente de tus acciones y pensamientos mientras realizas tus tareas laborales. Por ejemplo, al comenzar el día, puedes tomarte unos minutos para centrarte en tu respiración y establecer una intención positiva para el día.
Durante el día, puedes tomar breves descansos para practicar la atención plena, lo que te ayudará a recargar energías y mantenerte enfocado.
Si quieres empezar a practicar, estos ejercicios son simples pero efectivos, y pueden ayudarte a cultivar la atención plena en tu rutina laboral, reduciendo el estrés y aumentando tu bienestar general:
1-Respiración consciente
Tómate unos minutos al comienzo de cada jornada laboral para centrarte en tu respiración. Siéntate en una posición cómoda, cierra los ojos y concéntrate en el flujo de tu respiración.
Inhala y exhala profundamente, prestando atención a las sensaciones en tu cuerpo y al ritmo de tu respiración.
2-Pausas mindful
Programa pausas breves durante el día para practicar la atención plena. Puedes establecer una alarma en tu teléfono o utilizar momentos específicos, como antes de comenzar una reunión o al finalizar una tarea.
Durante estas pausas, dedica unos minutos a observar tus pensamientos, emociones y sensaciones físicas sin juzgar, simplemente aceptándolos tal como son.
3-Escaneo corporal
Realiza un escaneo corporal mientras estás sentado en tu escritorio. Comienza por los pies y lentamente dirige tu atención hacia arriba, prestando atención a cada parte de tu cuerpo, desde los dedos de los pies hasta la punta de la cabeza.
Observa cualquier tensión o sensación de incomodidad, y respira suavemente para relajar esas áreas.
4-Mindful walking
Aprovecha los momentos en los que necesitas desplazarte dentro de la oficina para practicar la atención plena en movimiento.
Camina conscientemente, sintiendo cada paso que das y prestando atención a las sensaciones en tus pies y piernas. Observa tu entorno con curiosidad, notando los colores, sonidos y olores a tu alrededor.
5-Mindful eating
Durante la hora del almuerzo o los descansos, practica la alimentación consciente.
Tómate tu tiempo para saborear cada bocado, observando los colores, texturas y sabores de los alimentos. Mastica lentamente y presta atención a las sensaciones en tu boca y en tu cuerpo mientras comes.
Reducir el estrés con mindfulness
Numerosos estudios han demostrado que la práctica regular de mindfulness puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad.
Y es que al prestar atención a tus experiencias presentes, puedes aprender a responder de manera más efectiva a situaciones estresantes en el trabajo. Por ejemplo, si te encuentras en una situación de alta presión, puedes utilizar técnicas de mindfulness, como la respiración consciente o la visualización, para calmarte y mantener la calma.
Además, el mindfulness te ayuda a desarrollar una mayor resiliencia emocional, lo que te permite afrontar los desafíos con una actitud más positiva y proactiva.
Mejorar la concentración y la atención
La atención plena también puede ayudar a mejorar la concentración y la atención en el trabajo. Al entrenar tu mente para estar más presente, puedes evitar distracciones y enfocarte mejor en la tarea que estás realizando.
Por ejemplo, al realizar una tarea, puedes practicar la atención plena al enfocarte en los detalles y mantenerte presente en el momento. Esto te permite trabajar de manera más eficiente y productiva.
Puedes empezar a practicar con este ejercicio:
Mindful tasking
- Elige una tarea específica que necesites realizar en tu trabajo, como responder correos electrónicos, redactar un informe o completar una hoja de cálculo.
- Antes de comenzar, tómate unos minutos para prepararte mentalmente. Respira profundamente y establece la intención de enfocarte completamente en la tarea que vas a realizar.
- Una vez que estés listo, comienza la tarea con atención plena. Concéntrate en cada paso del proceso, desde la planificación hasta la ejecución.
- Observa tus pensamientos y emociones mientras trabajas, pero no te apegues a ellos ni te dejes distraer. Si te encuentras divagando, suavemente redirige tu atención hacia la tarea en cuestión.
- Intenta mantener una postura de curiosidad y apertura mientras trabajas, observando los detalles y buscando la eficiencia sin perder de vista la calidad.
- Si notas que tu mente se aleja de la tarea, simplemente vuelve a traerla suavemente al momento presente y continúa con tu trabajo con atención plena.
- Al finalizar la tarea, tómate un momento para reflexionar sobre tu experiencia. Observa cualquier cambio en tu nivel de concentración y atención, y reconoce cualquier desafío que hayas enfrentado.
- Utiliza esta información para ajustar tu enfoque en futuras tareas y seguir desarrollando tu capacidad de atención plena en el trabajo.
Fomentar un ambiente laboral consciente
Los líderes desempeñan un papel clave en la promoción de una cultura de mindfulness en la empresa. Al fomentar un ambiente laboral consciente, los líderes pueden ayudar a crear un entorno en el que los empleados se sientan apoyados y valorados.
Por ejemplo, esto puede incluir la organización de sesiones de mindfulness en el lugar de trabajo, la incorporación de prácticas de mindfulness en las reuniones o la promoción de un equilibrio entre el trabajo y la vida personal.
Al crear un ambiente que fomenta la atención plena, las empresas pueden mejorar el bienestar de sus empleados y promover una cultura de colaboración y creatividad.
Y es que el mindfulness no solo es una herramienta efectiva para reducir el estrés en el trabajo, sino que también puede mejorar la productividad y el bienestar general de los empleados.
Al integrar prácticas de mindfulness en la rutina laboral, las empresas crean un entorno más saludable y consciente para sus empleados, lo que a su vez tiene un impacto positivo en el éxito y la sostenibilidad a largo plazo del negocio.
Si quieres saber cómo empezar a implementar estas prácticas en tu empresa, contáctame.
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Mònica Moles
Coach, Economista. Consultora de RRHH y formadora. Experta en Mindfulness y desarrollo del Liderazgo consciente 