Las técnicas de respiración te ayudan a calmar la mente, abrirte a la creatividad y a la imaginación. Al prestar atención a la respiración te das cuenta de cómo son tus pensamientos y diálogos internos.
Cuando dejas de querer controlar a tu mente, permitiendo que los pensamientos fluyan sin aferrarte a ellos, aprendes a dejarlos pasar. Con ello tu mente se calma, ganas claridad y además, aumenta la confianza en ti.
Una forma distinta de ponerlo en práctica es dibujando olas. Sigue estos 5 sencillos pasos:
- Sitúa la punta de un lápiz al comienzo de la primera ola de la página siguiente.
- Mientras inspiras lentamente, sigue el trazo ascendente y al exhalar, el descendente. No levantes el lápiz del papel, sigue respirando consciente hasta el final de la ola. Si aparece del deseo de ir más deprisa o más lento, tan sólo obsérvalo sin dejarte llevar por él.
- Utiliza ahora el lápiz para dibujar tu propio “oleaje respiratorio”. Déjate llevar por la inspiración para el trazo ascendente , y al exhalar para el trazo el descendente.
- Percibe las pausas entre respiraciones, dentro y fuera de ti. Deja que el lápiz descanse en ellas.
- Sigue dibujando olas en la página, mueve el lápiz al ritmo de tu respiración.
Dibujar olas es una forma de entrenar tu mente y practicar mindfulness. Y si quieres ir un poco más allá, visualiza las olas del mar que van y vienen, y cómo chocan contra las rocas y vuelven de nuevo.
¿Qué cambia cuando lo haces?
Si quieres seguir practicando un poco más, sigue esta una sesión gratuita de mindfulness con una práctica guiada que he grabado para disfrutar de los beneficios de la experiencia.
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