En el dinámico mundo laboral actual, la resiliencia se ha convertido en una de las cualidades esenciales. Pero ¿qué implica realmente ser resiliente?
La resiliencia se refiere a la capacidad de adaptarte y recuperarte frente a los desafíos y adversidades, manteniendo un rendimiento eficaz y un bienestar emocional.
Identificación de desafíos comunes
Fíjate, la presión de los plazos, la carga de trabajo elevada, la gestión de conflictos o la adaptación a los cambios, son desafíos comunes en todas las empresas.
Por ello el primer paso para poder abordarlos con mayor eficacia y construir una resiliencia sólida es identificarlos.
Elementos clave de la resiliencia
Desarrollar la resiliencia implica comprender y fortalecer ciertos componentes clave:
- Autoconocimiento: Entender nuestras fortalezas y áreas de mejora.
- Optimismo: Mantener una actitud positiva incluso ante desafíos.
- Red de apoyo: Contar con relaciones sólidas y de apoyo en el trabajo.
Estrategias para fomentar la resiliencia
Para construir resiliencia, es crucial incorporar estrategias prácticas en la rutina diaria. Aquí te comparto varias estrategias.
1-Mindfulness
La atención plena te ayuda a gestionar el estrés y a mantener la calma.
Puedes por ejemplo, realizar sesiones cortas de respiración consciente durante el día. Te ayudarán a aprender a parar, a reducir el ritmo, liberar tensiones y ganar perspectiva para volver de nuevo a la actividad con mayor calma y claridad mental.
2-Establecer metas realistas
Definir objetivos alcanzables promueve el sentido de logro.
Por ejemplo, puedes desglosar grandes proyectos en tareas más manejables y alcanzables. Te ayudará a mantenerte motivado, porque notarás que progresas y avanzas, te dará confianza para seguir adelante a pesar de las dificultades.
3-Aprendizaje continuo
Ver los desafíos como oportunidades de crecimiento.
Por ejemplo, puedes mantener un diario de aprendizajes personales y profesionales. Te ayudará a darte cuenta que esos desafíos estaban allí porque por algún motivo, había algo que debías resolver o aprender para poder luego alcanzar algo más grande.
4- Desarrollar habilidades de afrontamiento
Implementar programas de entrenamiento en habilidades de afrontamiento como el manejo del estrés o la gestión de emociones, ayuda a los empleados a enfrentar situaciones estresantes.
Te comparto varios ejercicios que pueden ayudarte a desarrollar estas habilidades.
Diario de gratitud
Pide a los empleados que mantengan un diario en el que escriban tres cosas por las que están agradecidos cada día.
De esta manera fomentas el enfoque en aspectos positivos, mejorando la perspectiva y el manejo del estrés.
Técnica de respiración profunda
Introduce prácticas de respiración consciente, como la respiración abdominal profunda.
Proporciona comentarios guiados, sesiones prácticas de respiración o visualizaciones para ayudar a los empleados a utilizar esta técnica cuando se enfrenten a situaciones estresantes.
Visualización positiva
Dirige ejercicios de visualización donde los empleados imaginen un resultado positivo en situaciones desafiantes.
De esta manera les ayudas a cambiar la percepción y a construir confianza en las habilidades de afrontamiento.
Reestructuración cognitiva
Anima a los empleados a identificar pensamientos negativos y a reemplazarlos por pensamientos más realistas y positivos. Puedes proporcionarles herramientas para desafiar y cambiar patrones de pensamiento.
Estrategias de resolución de problemas
Realiza talleres sobre técnicas efectivas de resolución de problemas. Proporciona situaciones hipotéticas y guía a los empleados para que desarrollen soluciones prácticas y alcanzables.
Desconexión digital programada
Promueve pausas digitales en las que los empleados se desconecten de dispositivos electrónicos durante ciertos momentos del día.
5-Fomentar una cultura de apoyo mutuo
Establece programas de mentoría entre empleados para crear un ambiente de apoyo.
Por ejemplo, puedes fomentar que los empleados más experimentados guíen a los nuevos integrantes, proporcionando orientación y compartiendo experiencias.
6-Impulsar la comunicación abierta
Fomenta un entorno en el que los empleados se sientan cómodos compartiendo sus preocupaciones.
Por ejemplo, organiza reuniones mensuales para alentar a los equipos a expresar sus inquietudes y sugerencias, creando un ambiente de confianza y apertura.
7-Promover la flexibilidad laboral
Ofrece opciones de trabajo flexible, como horarios adaptativos o días de teletrabajo.
Puedes por ejemplo implementar políticas que permitan a los empleados ajustar sus horarios según sus necesidades.
8-Incentivar la autocuidado
Introducir programas de bienestar que promuevan el autocuidado.
Por ejemplo, organiza sesiones de yoga y mindfulness durante la semana laboral para que los empleados dediquen tiempo a cuidar su bienestar físico y mental.
9-Establecer objetivos de desarrollo personal
Facilita la creación de planes de desarrollo individual que incluyan metas profesionales y personales.
Por ejemplo, promueve el desarrollo de un liderazgo consciente, en el que los líderes acompañen a cada miembro de su equipo a establecer objetivos de crecimiento que revisan regularmente, fomentando así la resiliencia al brindar un sentido claro de dirección.
10-Celebrar los éxitos y logros
Implementa reconocimientos y celebraciones por los logros individuales y del equipo.
Por ejemplo, puedes organizar eventos trimestrales para reconocer y celebrar los hitos alcanzados, fomentando así una cultura de logros y resiliencia.
Y es que cultivar la resiliencia no solo beneficia a los empleados sino también a las organizaciones, porque al integrar prácticas que fomentan la resiliencia no solo mejora la capacidad de adaptación sino que también contribuye a un ambiente laboral más saludable y productivo.
Fomentar la resiliencia es una inversión en el bienestar y el rendimiento sostenible. Si necesitas ayuda para promover un ambiente laboral en el que los empleados puedan enfrentar los desafíos de manera efectiva y adaptarse a cambios de manera positiva, contáctame.
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Mònica Moles
Coach, Economista. Consultora de RRHH y formadora. Experta en Mindfulness y desarrollo del Liderazgo consciente